Una vez más...

En menos de una semana estoy estrenando, nuevamente, posición. El acomo del viernes pasado no era del todo cómodo, la sensación de claustrofobia y aislamiento ayer terminaron por ponerme los nevios de punta. Realmente no sé qué es lo que sienta un claustrofóbico, pero el tener de frente durante ocho horas la pared, además de que mi visión periférica sólo lograba captar... paredes. Eso me hacía sentir encerrado en un cuarto blanco.

Este acomodo quizás no sea el más adecuado según la corriente del feng-shui, o de algún diseñador de interiores [conozco una en Milán =P], pues rompe con un principio básico: la armonía. Pero ya tengo vista hacia el frente y el escaner siguirá conectado, que fue el motivo del primer cambio.

Justo terminaba de hacer el cambio cuando llegan las nuevas contadoras [¿cuántas van?], de tanto explicarles como se capturan las cosas, que significa equis documento creo que pronto obtendré mi doctorado, aunque sea honoris causa. Una de ellas tiene cara familiar, detesto tanto el pensar 'conozco esa cara' y no saber de dónde, me ha pasado mucho ultimamente. Esta misma contadora, ve con tanto detenimiento mi bigote que no sé cómo he controlado el decir '¿qué me ves?, sí, es de verdad' o el aguantarme la risa. Ahora entiendo a Chris [bajista de Muse], que decía que se quitó ese look porque su cara recibía mucha atención.

Bueno, a ver cuánto dura este acomodo y estas contadoras, que de primera puedo decir, se ven más preparadas que las anteriores.

Cheers!