Amy...

| 24 julio 2011 | 1 Opiniones |

Neighborhood

| 07 julio 2011 | 1 Opiniones |
En esta ocasión voy a hablar de algo que no me gusta hablar, pero espero, por única vez lo haré. Se trata de los vecinos, la razón por lo que no hablo sobre ellos es porque siempre hemos tenido vecinos nocivos, por la razón que quieran, que si estacionan sus carros en nuestros lugares, que si nos tiran basura, etc., etc.

Los vecinos de los que hablaré son tan raros. Para empezar, su casa tiene una fachada estilo lote baldío, así tal cual. Por mucho tiempo, hasta su frente tenía hasta huecos en la pared. Luego, permitieron a los cholos hacer pintas, ya saben, esos murales tan bellos. ¿Para qué el esfuerzo de hacer de su casa un horror? No sé que mañas tengan, pero se esconden de cobradores, hasta de los del agua purificada, en pocas palabras, quieren que piensen que eso no es una casa.

¿En qué nos perjudica? Pues en varios aspectos, desde la apariencia de la calle, que desafortunadamente no es muy bonita gracias a las canchas de fut que tenemos en frente, que son dignas para filmar alguna escena de batalla en algún desierto post-apocalíptico de alguna película de serie B. Por tal motivo, al no querer que parezca casa, jamás limpian su frente.

Eso sí, cualquier cosa que le pase a su lujosa morada culpan a los demás, o a nosotros, para ser específicos. Un día, nos culparon de que en su casa había humedad y que estaba afectando sus muros... ¿qué chingaos, a poco les preocupa?. Ah, sí, desde luego la humedad que tenían era porque en SU casa tenían una fuga.

Tienen una manía, bueno, una de tantas: martillar. No sé que tanto martillen, su casa ha de ser un queso gruyer. No tengo nada en contra de que su sala sea una galería de arte, pero... ¿martillar a las 12, 1, 2, 3 de la MADRUGADA? Eso sí, permítanme la expresión, es una mamada. [Ahorita no es ninguna de esas horas, pero JURO que acaban de martillar].

Otra cosa, a las mismas horas inconvenientes... AZOTAR las puertas, todo fuera como azotar puertas de madera, un ruido seco..., pero NO, son puertas de metal que dejan su resonancia por horas... bueno, no, pero a esa hora lo parece.

Sus perritos, no sé cuántas docenas tengan, pero suena a una jauría; durante el día hacen poco escándalo, ¿pero qué tal por las noches? Puff.

Hace un par de días, mientras mi mamá regaba nuestro jardín fue testigo de cómo esta gente, bueno, no sé si les haga un favor al llamarlos gente, estos animales... no, tampoco; esas cosas que viven a nuestro lado, LANZABAN bolsas de basura a la casa de al lado, que por muy deshabitada que esté creo que la acción no es de gente civilizada; imagino por la enorme hueva de ir al contenedor que está a cuadra y media o quizás por el temor de ser visto por los cobradores...

¿Qué hicimos para merecer semejantes vecinos?

Cheers!

Nuh-uh

| 05 julio 2011 | 1 Opiniones |
Estaba dispuesto a improvisar un maldito cuento, como aquel de la princesa bipolar, el del prisma, o el de aquella pareja de enamorados desenamorados; pero los desgraciados, mejor dicho, el desgraciado [es que parece varios] culícidos, o séase, mosquito, zancudo, insecto chupasangre, etc., que es más escurridizo que un salmón, se encargó de correr a mi tan desaparecida y creí recién encontrada inspiración.

Ni con plaquita lo he podido aplacar, desgraciado. Es increíble como algo tan pequeño me tenga tan alterado, no dejo de estar pajareando, con un ojo al gato y otro al garabato, mirando por el rabillo del ojo pa' localizarlo. Es todo un ninja.

Seguro en algún momento, daré un aplauso para tu muerte.

Cheers!