El retrato oval

| 07 abril 2009 | 3 Opiniones |
El castillo en el cual mi criado se le había ocurrido penetrar a la fuerza en vez de permitirme, malhadadamente herido como estaba, de pasar una noche al ras, era uno de esos edificios mezcla de grandeza y de melancolía que durante tanto tiempo levantaron sus altivas frentes en medio de los Apeninos, tanto en la realidad como en la imaginación de Mistress Radcliffe. Según toda apariencia, el castillo había sido recientemente abandonado, aunque temporariamente.

Nos instalamos en una de las habitaciones más pequeñas y menos suntuosamente amuebladas. Estaba situada en una torre aislada del resto del edificio. Su decorado era rico, pero antiguo y sumamente deteriorado. Los muros estaban cubiertos de tapicerías y adornados con numerosos trofeos heráldicos de toda clase, y de ellos pendían un número verdaderamente prodigioso de pinturas modernas, ricas de estilo, encerradas en sendos marcos dorados, de gusto arabesco.

Me produjeron profundo interés, y quizá mi incipiente delirio fue la causa, aquellos cuadros colgados no solamente en las paredes principales, sino también en una porción de rincones que la arquitectura caprichosa del castillo hacía inevitable; hice a Pedro cerrar los pesados postigos del salón, pues ya era hora avanzada, encender un gran candelabro de muchos brazos colocado al lado de mi cabecera, y abrir completamente las cortinas de negro terciopelo, guar
necidas de festones, que rodeaban el lecho.

Quíselo así para poder, al menos, si no reconciliaba el sueño, distraerme alternativamente entre la contemplación de estas pinturas y la lectura de un pequeño volumen que había encontrado sobre la almohada, en que se criticaban y analizaban.

Leí largo tiempo; contemplé las pinturas religiosas devotamente; las horas huyeron, rápidas y silenciosas, y llegó la media noche. La posición del candelabro me molestaba, y extendiendo la mano con dificultad para no turbar el sueño de mi criado, lo coloqué de modo que arrojase la luz de lleno sobre el libro.

Pero este movimiento produjo un efecto completamente inesperado. La luz de sus numerosas bujías dio de pleno en un nicho del salón que una de las columnas del lecho había hasta entonces cubierto con una sombra profunda. Vi envuelto en viva luz un cuadro que hasta entonces no advirtiera. Era el retrato de una joven ya formada, casi mujer. Lo contemplé rápidamente y cerré los ojos. ¿Por qué? No me lo expliqué al principio; pero, en tanto que mis ojos permanecieron cerrados, analicé rápidamente el motivo que me los hacía cerrar. Era un movimiento involuntario para ganar tiempo y recapacitar, para asegurarme de que mi vista no me había engañado, para calmar y preparar mi espíritu a una contemplación más fría y más serena. Al cabo de algunos momentos, miré de nuevo el lienzo fijamente.

No era posible dudar, aun cuando lo hubiese querido; porque el primer rayo de luz al caer sobre el lienzo, había desvanecido el estupor delirante de que mis sentidos se hallaban poseídos, haciéndome volver repentinamente a la realidad de la vida.

El cuadro representaba, como ya he dicho, a una joven. se trataba sencillamente de un retrato de medio cuerpo, todo en este estilo que se llama, en lenguaje técnico, estilo de viñeta; había en él mucho de la manera de pintar de Sully en sus cabezas favoritas. Los brazos, el seno y las puntas de sus radiantes cabellos, pendíanse en la sombra vaga, pero profunda, que servía de fondo a la imagen.

El marco era oval, magníficamente dorado, y de un bello estilo morisco. Tal vez no fuese ni la ejecución de la obra, ni la excepcional belleza de su fisonomía lo que me impresionó tan repentina y profundamente. No podía creer que mi imaginación, al salir de su delirio, hubiese tomado la cabeza por la de una persona viva. Empero, los detalles del dibujo, el estilo de viñeta y el aspecto del marco, no me permitieron dudar ni un solo instante. Abismado en estas reflexiones, permanecí una hora entera con los ojos fijos en el retrato.

Aquella inexplicable expresión de realidad y vida que al principio me hiciera estremecer, acabó por subyugarme. Lleno de terror y respeto, volví el candelabro a su primera posición, y habiendo así apartado de mi vista la causa de mi profunda agitación, me apoderé ansiosamente del volumen que contenía la historia y descripción de los cuadros. Busqué inmediatamente el número correspondiente al que marcaba el retrato oval, y leí la extraña y singular historia siguiente:

"Era una joven de peregrina belleza, tan graciosa como amable, que en mal hora amó al pintor y se desposó con él. Él tenía un carácter apasionado, estudioso y austero, y había puesto en el arte sus amores; ella, joven, de rarísima belleza, toda luz y sonrisas, con la alegría de un cervatillo, amándolo todo, no odiando más que el arte, que era su rival, no temiendo más que la paleta, los pinceles y demás instrumentos importunos que le arrebataban el amor de su adorado. Terrible impresión causó a la dama oír al pintor hablar del deseo de retratarla. Mas era humilde y sumisa, y sentóse pacientemente, durante largas semanas, en la sombría y alta habitación de la torre, donde la luz se filtraba sobre el pálido lienzo solamente por el cielo raso.

El artista cifraba su gloria en su obra, que avanzaba de hora en hora, de día en día. Y era un hombre vehemente, extraño, pensativo y que se perdía en mil ensueños; tanto que no veía que la luz que penetraba tan lúgubremente en esta torre aislada secaba la salud y los encantos de su mujer, que se consumía para todos excepto para él.

Ella, no obstante, sonreía más y más, porque veía que el pintor, que disfrutaba de gran fama, experimentaba un vivo y ardiente placer en su tarea, y trabajaba noche y día para trasladar al lienzo la imagen de la que tanto amaba, la cual de día en día tornábase más débil y desanimada. Y, en verdad, los que contemplaban el retrato, comentaban en voz baja su semejanza maravillosa, prueba palpable del genio del pintor, y del profundo amor que su modelo le inspiraba.

Pero, al fin, cuando el trabajo tocaba a su término, no se permitió a nadie entrar en la torre; porque el pintor había llegado a enloquecer por el ardor con que tomaba su trabajo, y levantaba los ojos rara vez del lienzo, ni aun para mirar el rostro de su esposa. Y no podía ver que los colores que extendía sobre el lienzo borrábanse de las mejillas de la que tenía sentada a su lado. Y cuando muchas semanas hubieron transcurrido, y no restaba por hacer más que una cosa muy pequeña, sólo dar un toque sobre la boca y otro sobre los ojos, el alma de la dama palpitó aún, como la llama de una lámpara que está próxima a extinguirse.

Y entonces el pintor dio los toques, y durante un instante quedó en éxtasis ante el trabajo que había ejecutado. Pero un minuto después, estremeciéndose, palideció intensamente herido por el terror, y gritó con voz terrible: "¡En verdad, esta es la vida misma!" Se volvió bruscamente para mirar a su bien amada: ¡Estaba muerta!"

Edgar Allan Poe


Spaceman

| 06 abril 2009 | 3 Opiniones |
No sé por qué, el nuevo video de The Killers, 'Spaceman' me recuerda a otros dos videos, curiosamente, los otros dos son muy parecidos, bueno, hasta cierto punto obvio.






No More Fun

| | 3 Opiniones |
Este es uno de aquellos post que he querido hacer desde hace aproximadamente un mes, y que por hacer otro, lo llegaba a olvidar, pero el sábado por la noche me refrescaron la memoria. Así que aquí voy.

Todo surgió debido a un post publicado en una página 'Queenera' cuyo título es 'Ya no me gusta Queen como antes', en el que un chavo da sus puntos del por qué ya no tiene ese gusto por Queen, culpando a terceros de tal suceso. En este caso culpa a los supermegahiperfans del grupo y cada una de sus 'clasificaciones', no sin antes describir su vida 'al lado del cuarteto.

En él menciona cómo fue su acercamiento al grupo y como se empezó a rodear de gente con el mismo gusto y se involucraba cada vez más en foros y sitios relacionados al grupo. Hasta que un día, como mencioné, los 'fans empedernidos' [los fanáicos 'weones', los fundamentalistas, los que se creen Queen y los locos], todos ellos lograron que este tipo se hartara de Queen. Que porque hacen dibujos de ellos, poemas, recuerdan las fechas de cumpleaños, aniversario luctoso, etc, etc, y lo peor de todo es que ellos JAMÁS lo agradecerán, cosa muy cierta.

Creo que todos, o casi todos hemos caido en alguna etapa de fanatismo, cosa bastante común sobre todo en la adolescencia y no sólo con Queen, puede ser con cualquier grupo, hasta con un equipo de futbol, ahora, el hecho de que haya seguidores que si comen, viven y respiran Queen no creo que sea motivo suficiente como para hacer lo siguiente:



Romper tu discografía, y además de hacerlo tomarte una fotografía donde se ven los restos de al menos tres de los mejores discos, 'Queen II', 'Sheer Heart Attack' y 'A Night At The Opera'. Y sobre todo el mensaje que manda el tipo queriendo demostrar su 'madurez' cuando cayó, según yo, en el extremo contrario, así como muchos de los 'fans' que muestran ser irritables por cualquier estímulo exterior, es decir, si dicen que Freddie era gay, [aunque de cierta forma era bisexual haha] muchos de los fans se enojan. Él también lo hizo, se dejó afectar por aquellos fanáticos. Creo que era más fácil dejar de frecuentar ciertos sitios y dejar de hablar con la gente que es así. Digo, a fin de cuentas no deben importarnos esos fans empedernidos, que hagan de su vida un papalote.

Yo tengo un par de contactos que tienen un gusto exagerado por el grupo, y sí, llegan a aburrir, los ves escuchando sólo Queen, parece que youtube se llama Queentube, conocen todas las páginas relacionadas al grupo, se saben el orden y duración de las canciones, etc., etc., y no hay mejor antídoto que el ignorarlos o darles el avionazo.

Digo que te afecte algo así pare llegar a tal punto está canijo, porque cayó en otro extremo, en una especie de odio, de cierta forma. Pero sigo sin entender qué relación hay entre Queen y las formas de pensar de los fans, qué tan influenciable puede ser este chavo. Es como decir que ya no le voy a las Chivas por que hay tipos que van a verlos a donde quiera que vayan, y porque se compran las playeras, y porque se saben los cantos, porque ven los juegos, porque admiran a Ramón Morales, etc.. o sea, no encuentro relación alguna.

Pero bueno, cada cabeza es un mundo y que hagan lo que quieran, yo he tenido temporadas en que los abandono y está bien, hay que descansar a los oidos, luego me llegarán racha en que no los suelto y así. Eso sí, estoy seguro que en mi etapa de Queenero irremediable a más de uno fastidié.

Cheers!

Millonaire Waltz

| 03 abril 2009 | 4 Opiniones |
Tengo una alergia, no sé que tan mala sea, pero hace ya dos años que la descubrí, y siento que es una alergia mutante y lo hace día tras día.

Ayer hace dos años empecé a laborar aquí, y con ello llegó la alergia, y no es una hacia al trabajo, sino a la gente, sobre todo a la presuntuosa, y más la que presume tener y a la hora de la verdad demuestra que sólo es apariencia y también la gente prepotente. Este 'mal' lo he tenido desde hace muchos años, pero hace dos años se empezó a agudizar.

La gente que llega aquí, en sus autos del año, entran hablando con su Nextel, de lente obscuro, etc, etc... literalmente gritando que quieren ir a equis lugar, piden cientas de cotizaciones, para al final, pedir la más barata.

Recuerdo una ocasión, en que un cliente frecuente llegó para arreglar su viaje, necesitabamos tener copia de sus pasaportes, por lo cual, el jefe me pidió escanearlos. Por aquel entonces yo tenía la vieja pecé que se trababa con sólo verla. Total que al cliente este se le hacía tarde, creo que para saludar a su mamá, que a mitad de la escaneada viene a mi oficina y dice:

- Dame los pasaportes, tengo prisa y te estás tardando

En ese momento tuve ganas de aventarle los pasaportes en su cara y decirle que se los metiera por el lugar más obscuro de su diminuta humanidad. Pero sólo se los entregué.

Esa misma persona, un día llamó, buscaba a mi jefe y le comenté que él estaba en una llamada y entonces con su respetuosa manera de ser me dice:

- ¿No puede colgar?, es que estoy hablando desde Houston, es larga distacia y es muy caro...

¿?... viaja a Houston casi que dos veces por mes y ¿no puede esperar en la línea o hablar unos quince minutos después? Sí, por algo tienen dinero, porque no quieren gastarlo.

O como aquel que llegó casi que exigiendo que se le hiciera mínimo un 20-25% de descuento en el paquete que pensaba comprar, que porque era época de austeridad. 'Yo tengo mi negocio y sé de eso, la situación está difícil' mi jefa obviamente le dijo que no, que si la situación estaba difícil era para todos, no sólo para él. No le gustó su respuesta, sólo dijo 'Ok, gracias', hasta eso educado, pero creo que se fue enojado porque se subió a su Hummer y se fue 'quemando llanta'.

Unos clientes iba a ir a Europa, eran un total de siete personas, el chistesito pues iba a ser bastante caro, y cuando les dijeron que iban a ser mil seiscientos diez pesos por la expedición de los siete boletos de avión pusieron el grito en el cielo, que era demasiado. Puff... que no mamen, sólo eran 230 por persona y eso que a partir de este año se bajó la tarifa setenta pesos.

Y así, es cómico ver gente así, pero al final uno termina odiándolos, creo que la gente con menos poder adquisitivo pone menos trabas para pagar, si les dices que son doscientos treinta pesos por la expedición no repelan, quizás lo hagan en su casa, pero aquí no.

En fin, gracias a esa gente que repele o no, tengo ingresos.

Cheers!


Gracias, Thank You, Danke, Merci....

| 02 abril 2009 | 3 Opiniones |
Hay ciertas palabras que deben ser pronunciadas para mostrar algo de educación, como el 'por favor' y 'gracias'. Palabras que no cuestan nada, al menos nunca he cobrado.

Digo, no estoy diciendo que digan hipopotomonstrosesquipedaliofobia [palabra irónica por cierto], cualquiera de las dos palabras [por favor y gracias, para aquellos distraidos] toman menos de dos segundos en ser pronunciadas, a menos claro, que se trate de un tartamudo.

En ocasiones, la falta de esas dos palabras pueden hacer diferencia entre que uno haga las cosas de buen o mal modo. En mi caso, provocan que lo haga de mala forma, ¿por qué?, porque parece que te están dando una orden, en vez de estar pidiendo un favor.

Oficina #2, con dos clientes, y un agente de ventas:
- Sergio, sácame una copia-
- [con un maleducado tengo... ] ¡voy para allá!

Nunca hubo un 'por favor' ahí me tienen, sacando la copia, voy y la entrego, espero unos y segundos... y no, no recibí un 'gracias'. Y casi siempre, digamos que el 93.7126% de las veces es una persona la que hace ver las cosas así, es más ni la Princesa se ve tan mal. Es como si en ese momento quisera dejar en claro quién es el jefe y quién el subordinado.

Y así una y otra vez a lo largo del día, a veces se les escapa cualquiera de las dos, y cuando dicen las dos, la verdad temo que sea el comienzo de un apocalipsis.

Hoy contesté una llamada, como siempre con mi voz de locutor seductor y con todo el respeto:

- [Nombre del negocio], buenas tardes
- ¿A dónde hablo?
- [¬¬] a [nombre del negocio]
- a ver, esperese...
- ...ok
- tututututututu...

¿Tan difícil es decir, '¡Ah, gracias! perdón, me equivoqué'?... creo que ya había hecho un post parecido, pero es que de verdad me parece increible que la gente no tenga a veces esa mínima educación.

Pero bueno, no hay que pedirle peras al olmo...

Cheers!

México Ja-Ja-Ja

| 01 abril 2009 | 4 Opiniones |
Bueno, después de tanto bla bla bla, de que si 'El Tri' había recuperado su nivel [¿cuál?], volvieron a perder... jojo

Y cómo chinga'os no, aquí en Nevermore también tenemos promociones.... aquí no nos andamos con las jaladas [hàgame Ud. el favor] de que 'Corazón Verde' ¿qué acaso les falta madurar? por algo juegan tan de la... fregada... o que 'nos ponemos la verde' más bien le ponen a la verde, que por eso salen a decir montón de pentontadas... o que si 'el trí de mi corazón' Corazón les falta... ojalá algún día les sobrara...

O qué tal la de 'Abraza a tu selección', no maaaaaaaamen... aquí no se estila eso, para nada... aquí es:

'MENTALE LA MADRE AL TRI'



De por si, bastante jodidito está nuestro futbol para que el 'TRI' nos represente [lastimosamente] a nivel internacional, así es, escoja Ud. al jugador que más le caguelamadre, y si no quiere escoger sólo uno, méntesela a los 23 jugadores, entrenadores y federativos!!!

¿cuál es el premio?... Un auto obviamente no, una televisión tampoco, sólamente... naaam ustedes nomas ménteles la madre...

¡Lavolpe, Lavolpe!