Life goes on as it never ends...

Fue hace trece años y medio que dejé de verla, en días pasados, nos reencontramos.

Al volver a verla, era notoria su delgadez, si bien nunca fue una mujer llenita, tampoco era tan delgada.  Su sonrisa es la misma que recordaba, siempre tenía una sonrisa para todos, hasta para los que no fuimos sus amigos cercanos. El brillo de sus ojos oculta a la perfección la tristeza y el miedo que imagino que ha de sentir.

Su vida cambió en varios sentidos, se cambió de país, se casó y tristemente, tiene cáncer. Pero, aparentemente, eso no la ha hecho desistir, no se ha abandonado, ni ha dejado de luchar, que creo, en esos casos, es una de las partes más importantes para sobrellevar este tipo de enfermedades.

No sé si fue la última vez que la vi, espero de corazón que no sea así.

Para Mi Psicólogo VII [Trust me...]

Me da miedo saber que me tienen confianza.

Hoy por la mañana, llega una vecina al local con el pretexto de recoger unos catálogos, y digo que como pretexto porque, dijo, tenía ganas de platicar. Siempre me he considerado un pésimo conversador, pero un buen escuchador, por lo cual, la casi hora y media que ella estuvo aquí, fue ella quien platicó más rato. Luego, vine a escribir.

Primero empezó platicando sobre los productos de los catálogos para luego cambiar a temas personales, sobre su exmarido, sus hijas y su ahora expareja.  De cómo uno de ellos es un amor, que siempre recibió respeto, libertad, siempre tuvo su lugar y de cómo el otro es radicalmente lo opuesto y mucho bla-bla* que obviamente no cometaré aquí.

Comentó, además, que me platicaba todo esto porque soy una persona que le inspira confianza, y eso me puso a pensar en toda la gente que me ha dicho lo mismo. Siempre agradeceré la confianza que tienen en mí, me la haya ganado a pulso o no, pues hay gente que de buenas a primeras, en el primer contacto, me platica cosas que quizás no platicarían a cualquiera.

Sin embargo, esto siempre me ha creado cierto conflicto, más que nada por el temor a defraudar la misma. Aunque siempre me considerado una persona discreta y que puede mantener secretos como tal, siento mucha responsabilidad por esa confianza, toda esa información que la gente me confiere en espera de mantenerla a salvo, su manejo y el temor de que, de manera inconsciente, pueda revelarla y quizás ante gente que no debería. Afortunadamente, no ha pasado tal situación, creo,  pero el temor no deja de existir.

 Probablemente no esté imaginándome mas que una tormenta en un vaso de agua.

* La expresión no fue utilizada para menospreciar la conversación.

Quit palying games...

Quisiera encontrarle sentido a una situación en específico.

Meses atrás, una chava había demostrado cierto interés por mi, llegamos a salir y empezó a agradarme, también debo decir que la chava no es para nada fea.

Las primeras conversaciones me hicieron imaginar que era una chica madura, a pesar de sus veintiún años. Sin embargo, mientras más conversábamos, más me desilusionaba, o mejor dicho, dejó en claro el uso de una máscara.

De aquella chica que decía no ser celosa pasó a ser súper celosa, al grado de cuestionarme por qué mis amigas me hablan con tanto cariño, que si me gustan o por qué les contesto de la misma manera, todo esto, porque claro, se había dedicado a revisar mi perfil de Facebook. Luego, en cuestión de días, parecía apresurar las cosas, hasta me la llegué a imaginar pidiéndome matrimonio.

No pasaba día en que no platicáramos y de la misma manera, de un día a otro,  dejó de hablarme, al grado de que para el día de su cumpleaños, le mandé un mensaje y nunca lo contestó, lo mismo hizo con el mensaje en su muro de FB y la llamada.

No volví a saber de ella, hasta que un día me la topé en la feria y nos saludamos sólo con un hola. Hoy vino, saludó como si nada hubiera pasado y empezó a hacer indagaciones y declaraciones.

¿Viste que cambié mi foto en FB?

 Yo estoy muy feliz

¿Viste que ya tengo situación sentimental en fb?

Él es muy lindo, me dice [no recuerdo cómo] de cariño

Somos novios desde el sábado pasado, aunque ya teníamos tiempo saliendo

Él tiene veinticuatro años aunque aparenta tener menos y estudió en la UAA

Necesito bajar unos kilitos, porque voy a usar bikini en una pool party.

Es entonces cuando me pregunto, ¿por qué si me ignoró por tanto tiempo –supongo que por andar con su galán- meses después viene y me presume todo eso –y más-? La verdad, a mi no me había ni quitado el sueño y me importa un carajo. ¿Qué quiere conseguir?